La evaluación de riesgos alimentarios es un proceso sistemático que se utiliza para determinar la probabilidad y la gravedad de los efectos adversos para la salud que puedan derivarse de la exposición a peligros de origen alimentario. Es uno de los tres componentes del análisis del riesgo, junto con la gestión del riesgo y la comunicación del riesgo.
El objetivo de la evaluación de riesgos alimentarios es proporcionar información científica que sirva de base para la toma de decisiones en materia de seguridad alimentaria. Esta información puede utilizarse para establecer niveles de seguridad, desarrollar medidas de control y comunicar los riesgos a los consumidores.
Fases de la evaluación de riesgos alimentarios
La evaluación de riesgos alimentarios consta de cuatro fases:
Identificación del peligro
Se trata de la primera fase de la evaluación de riesgos alimentarios. En esta fase, se identifican los agentes biológicos, químicos y físicos que puedan causar efectos adversos para la salud.
Caracterización del peligro
Segunda fase de la evaluación de riesgos. El objetivo de esta fase es evaluar la naturaleza y gravedad de los efectos adversos para la salud asociados a cada peligro.
Evaluación de la exposición
En esta tercera fase de la evaluación de riesgos, se estima la cantidad de peligro que un consumidor puede ingerir a través de los alimentos.
Caracterización del riesgo
Cuarta y última fase de la evaluación de riesgos. En esta fase se combina la información sobre la probabilidad y la gravedad del peligro para estimar el riesgo para la salud.
Clasificación de los riesgos alimentarios
Generalmente, los peligros alimentarios se pueden clasificar según su origen como:
Peligros biológicos
Son microorganismos como bacterias, virus, parásitos y hongos, que pueden causar enfermedades transmitidas por los alimentos. Son los más comunes y pueden causar una amplia gama de enfermedades que van desde la salmonelosis hasta la intoxicación alimentaria por E. coli.
Peligros químicos
Son sustancias químicas como pesticidas, metales pesados y toxinas, que pueden contaminar los alimentos. Pueden estar presentes como resultado de la contaminación durante la producción, procesamiento o el almacenamiento. Y pueden causar efectos adversos que van desde problemas de salud temporales hasta cáncer.
Peligros físicos
Son objetos extraños como trozos de vidrio, plástico o metal que pueden causar lesiones. Son relativamente poco comunes, pero pueden causar lesiones graves como cortes, asfixia o perforación.
Importancia de la evaluación de riesgos alimentarios
La evaluación de riesgos alimentarios es un proceso fundamental para la seguridad alimentaria. Al proporcionar información científica sobre los riesgos asociados a los alimentos ayuda a identificar los peligros alimentarios, permitiendo a las autoridades sanitarias tomar medidas para controlar estos peligros y reducir el riesgo para los consumidores.
Además, la evaluación de riesgos ayuda a estimar el riesgo para la salud, posibilitando a las autoridades sanitarias a establecer niveles de seguridad y tomar medidas para reducir el riesgo al nivel más bajo posible.
Por último, la evaluación de riesgos alimentarios proporciona información para la toma de decisiones, que facilita la fijación de normas y reglamentos, así cómo, desarrollar diferentes medidas de control y poder comunicar los riesgos a los consumidores.
La evaluación de riesgos alimentarios es un proceso esencial para garantizar la seguridad alimentaria y proteger la salud de los consumidores. En FIT Safety contamos con personal altamente cualificado y capacitado para ayudarte a desarrollar una evaluación de riesgos alimentarios. Recuerda que puedes ponerte en contacto con nosotros a través de:
- Formulario de contacto.
- Email: info@fitsafety.es
- Teléfono: 928 365 696
